El caso prendió las alarmas de las autoridades por la manera en la que los hombres actuaron a plena luz del día y aprovechando que el comerciante se quedó solo.
Los colombianos parecen estar en peligro en cualquier lugar en el que se se encuentren, pues restaurantes, locales, viviendas, transporte público y hasta centros comerciales son aprovechados por los delincuentes para cometer todo tipo de delitos.
A la nueva modalidad de robo que se presenta en Cali y en el que los ladrones atraviesan vehículos en las vías para impedir el paso y robar a las personas, se suma el de los secuestros en lugares públicos y haciendo suplantación de las autoridades.
Ese fue el caso de un comerciante que había llegado al municipio de Chía, cercano a Bogotá, y que terminó siendo retenido contra su voluntad por un grupo de hombres que usaban prendas oficiales de la Policía.
Los falsos agentes se llevaron al empresario que, según Giovanni Celis, director del noticiero Red+ Noticias, vino a Bogotá a pasar el día del padre. Una vez su esposa fue al baño y dejó al hombre esperando a la salida de ese lugar fue abordado por los delincuentes quienes mediante posibles engaños hicieron que los acompañara.
Acto seguido, el comerciante fue abordado por los falsos policías que lo condujeron hasta un vehículo particular al que fue subido por dos hombres y llevado con rumbo desconocido. En el momento, la Policía hace un plan candado para dar con la captura de los delincuentes y, por supuesto, con la liberación del hombre.