Al parecer este nombramiento del presidente Gustavo Petro, hecho recientemente al general en retiro Pedro Sánchez como nuevo Ministro de Defensa, sería una de las mejores apuestas del gobierno para combatir la delincuencia.
Desde su llegada, el alto funcionario ha adoptado una postura firme frente a los grupos armados ilegales, reforzando las acciones militares en distintas regiones del país.
Su designación ha sido vista como una apuesta por fortalecer la seguridad y el control territorial a través de la experiencia militar.
De acuerdo con cifras oficiales, los combates entre la fuerza pública y estructuras armadas ilegales han registrado un incremento del 71 % en comparación con los primeros tres meses del año 2024.
Este aumento refleja un cambio en la estrategia operativa impulsada por Sánchez, centrada en una ofensiva más decidida por parte de las Fuerzas Militares.
